Nuestro rebaño está formado por cabras de raza alpina. Esta raza soporta muy bien el frio y la altura, condiciones que se dan en Josa. Por eso se sienten tan bien aquí. Cada día del año salen a pastar y se alimentan de los pastos de bosque y alta montaña.

Tener el rebaño en casa nos asegura una leche de máxima calidad y las mejores condiciones para trabajar. Respetamos su ciclo natural para hacer el queso. Incorporamos los machos cabríos al rebaño durante el mes de setiembre para asegurarnos la reproducción. En febrero, cuando comienzan a nacer los cabritos, los machos se retiran hasta el setiembre siguiente. La época de lactación va de febrero a noviembre y ellas descansan tres meses para afrontar mejor la gestación y la próxima temporada.

La Ronaldinya, la Mariaxi, la Queca... son algunos de los nombres de nuestras mimadas. ¡Sin ellas no podríamos elaborar el queso!